El nombre de la página Web es un factor de gran importancia en el éxito de cualquier proyecto en internet. Es vital conocer algunos aspectos determinantes a la hora de comprar dominio, ya que esto influye en gran medida sobre el triunfo de la marca y en el resultado de los objetivos trazados.
Existen gran cantidad de empresas en el mercado, especializadas en orientar y guiar en todo el proceso desde el comienzo, por ejemplo, Webempresa ofrece todos los servicios necesarios, desde la creación de la cuenta hasta la realización de copias de seguridad, además de eficientes métodos para hacer que las Webs carguen rápidamente y funcionen sin interrupciones.
El nombre de la página Web y el nombre de dominio
El nombre del dominio es la dirección de internet y está formado por el nombre de la página Web (o un nombre relacionado de libre elección) y una extensión o sufijo. Por ejemplo, Webempresa es el nombre de la página y “.com” es la extensión. En este caso el nombre del domino es Webempresa.com. La URL es la dirección específica que conduce al usuario a la página concreta que está buscando.
¿Por qué el nombre de dominio es importante?
El nombre de dominio le imprime personalidad a la marca y transmite una imagen de la página Web. Esto se puede usar a nuestro favor eligiendo un nombre que transmita el mensaje que deseamos enviar al público. Por otra parte, un nombre adecuado garantiza que los clientes potenciales lo recuerden y puedan encontrar la página con facilidad. Para esto es aconsejable que sea un nombre relacionado con la marca.
En términos SEO (Optimización en Motores de Búsqueda) el nombre de dominio resulta clave para lograr un buen posicionamiento en el buscador, aunque los factores que influyen son muchos, este es uno de ellos.
Cómo elegir el nombre correcto
El nombre es una gran decisión y algunos consejos prácticos pueden ayudar mucho para hacerlo de forma adecuada.
- El nombre debe ser corto y sencillo de recordar. Se recomienda un máximo de 12 caracteres, aunque no es una regla y todo depende del caso. Lo ideal es que sea conciso y sencillo de recordar. El límite es de 63 caracteres, pero no es recomendable usar nombres tan largos.
- Debe ser sencillo de escribir y de pronunciar. Esto es muy importante para que el usuario potencial encuentre la página de forma fácil y la recomiende o transmita la información. También se recomienda no poner palabras que son mal escritas con frecuencia. Las abreviaciones son desaconsejadas.
- Los caracteres que componen el nombre solo deben ser letras. Esto es de vital importancia, no se deben usar números ni caracteres especiales, ya que esto confunde fácilmente al usuario. Además, en algunos móviles no son tan fáciles de ubicar como las letras. El uso de la letra “ñ”, los acentos y consonantes dobles deben evitarse.
- El nombre asignado es la identidad de la marca por lo que es recomendable elegir un nombre que tenga relación o esté asociado a ella. Se debe estar seguro que el nombre no esté ya usado por la competencia y que se pueda identificar fácilmente con nuestro producto.
Sin importar de qué se trate el negocio o producto, la elección de un buen nombre para la página Web es un factor decisivo sobre éxito que tendrá en el mundo digital. Un nombre relacionado con la marca y fácilmente identificable es la clave de la elección.
