Uso de Saxenda para adelgazar

Bajar de peso nunca ha sido una labor sencilla, desde dietas mágicas falsas, pastillas prometedoras que tienen más efectos adversos que beneficios, ayuno intermitente, en fin, un sinnúmero de opciones distintas con resultados poco o nada favorables.





Sin embargo, la carrera de las farmacéuticas para ofrecernos una opción viable por fin ha llegado a un descubrimiento que en verdad vale la pena utilizar. El medicamento del que estamos hablando lleva por nombre Saxenda.

Este nuevo fármaco, perteneciente a la familia de las incretinas, se desarrolló originalmente para el tratamiento de la diabetes, sin embargo, sus efectos son muy útiles como tratamiento para combatir el sobrepeso y la obesidad.

Su uso es relativamente sencillo, con aplicaciones intradérmicas cada 24 horas. Ahora bien, revisemos un poco más de las características de este medicamento, para quién es y cómo funciona:

¿Qué es exactamente Saxenda?

Saxenda es un medicamento cuyo principio activo es la liraglutida, fármaco que, sin entrar en detalles demasiado técnicos, funciona emulando a una hormona (GLP-1) que normalmente se libera al terminar de comer.

En otras palabras, hace que el cerebro crea que acabamos de comer y por ende, nos ayuda a mantenernos satisfechos y sin hambre durante el transcurso del día, logrando así consumir menos alimentos y bajar de peso de manera sencilla.

¿Cómo saber si Saxenda es para mí?

Este fármaco es ideal para pacientes con un IMC arriba de 30, o uno arriba de 27 pero con alguna enfermedad relacionada al sobrepeso, como diabetes, hipertensión y dislipidemia.

Sencillo, ¿no? La realidad es que, según los datos más actuales de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al año 2016, el 39% de las personas mayores de 18 años de edad tenía sobrepeso, y el 13% tenía obesidad.

Por consiguiente, más del 50% de la población mundial adulta es candidata para usar Saxenda como adyuvante en su camino a bajar de peso. Pero ¿y si soy menor de edad? No te preocupes, Saxenda también puede ser utilizado en adolescentes, pero solo si tienen un peso corporal mayor a 60 kg y un médico los diagnostica con obesidad.

¿Cómo saber cuál es mi IMC?

Es normal que la siguiente duda sea esta y nos hemos adelantado, realmente el IMC no es más que un cálculo matemático muy sencillo y en internet hay miles de páginas en las cuales puedes ingresar tus datos y te arrojará el resultado sin problema.

Si aún así quieres calcularlo tu mismo, aquí te dejamos la fórmula:

¿Cómo se usa Saxenda?

Este medicamento viene en presentación inyectable, en una jeringa precargada con 3 ml, en presentación de 6 mg/ml. La dosis va escalando semana con semana hasta llegar a una dosis de mantenimiento de 3 mg por día, es decir, medio mililitro de la jeringa.

Su aplicación es subcutánea, es decir, la pluma se debe poner a 90 grados de la piel y aplicar la dosis una vez al día, de preferencia por las mañanas.

¿Hay algún efecto adverso?

Como todo medicamento, Saxenda tiene posibles efectos adversos, los más comunes siendo mareo y malestar gastrointestinal, pero solo durante las primeras semanas de uso y justo para prevenir esto, es que la dosis inicialmente es escalonada.

¿Cuánto peso puedo perder si utilizo Saxenda?

La disminución de peso corporal utilizando Saxenda, aunado a un plan de alimentación y ejercicio, según su ficha técnica, es en promedio de un 10% del peso corporal por un uso de 12 semanas.

Es tanto así el efecto, que si no se ha perdido al menos el 5% del peso corporal en un lapso de 12 semanas, la empresa recomienda suspender el medicamento y valorar otras alternativas.

Por ejemplo, si un individuo pesa 100 kg, debería esperar perder alrededor de 10kg en un período de 3 meses. Bastante bien, ¿no? La OMS recomienda disminuir un máximo de 1% de peso corporal por semana y Saxenda respeta este límite prometiendo una disminución del 0.83% por semana.

En resumen, Saxenda aparece como una alternativa ideal para los individuos con sobrepeso y obesidad que están cansados de realizar dietas sin ver resultados y previniendo efectos adversos no deseables, como los de algunos otros fármacos, que incluyen diarrea, vómito o malestar general.

No olvides consultar a tu médico antes de comprar Saxenda para valorar tu estado de salud general y poder llevar un buen control de tu pérdida de peso.

¿Qué opinas de este medicamento? ¿Estás listo para comprar Saxenda? Déjanos tus dudas y experiencias en los comentarios de este artículo.

También en GM

Destacamos