Remodelar la casa implica hacer cambios de ambientes, modificaciones en la iluminación, en el orden de la habitación, y también implica escoger el nuevo color que se va a aplicar en las paredes del hogar; generalmente este es un proceso difícil porque hay dudas sobre el tipo de pintura, si es mejor hacer diseños a mano o comprar vinilos decorativos adhesivos para el área que se va a renovar.
Por otro lado, también hay que elegir la textura, el acabado que mejor se adapta al interior o exterior de la casa, si es para la cocina, el baño, etc. Son varios aspectos que hay que considerar, y es por ello que la gente tiende a dudar si es mejor pintar la casa o hacer la decoración más práctica y sencilla.
Decorar la casa con papel pintado de pared
Una alternativa a la pintura es el papel pintado de pared, que es muy conocido por su practicidad y por la variedad estética que puede ofrecer a la hora de decorar la casa. Además, en los últimos años los papeles pintados se han vuelto populares porque vienen en distintas presentaciones como vinilo, de tela y papel no tejido.
Otra ventaja que tienen los papeles de pared es que se pueden personalizar según los gustos de cada persona. Es decir, el cliente puede solicitar un diseño específico, con las medidas correctas para sus paredes, y luego estamparlo en el lugar que desee.
Esta opción es ideal al hacer una renovación si, por ejemplo, las personas quieren habilitar rápidamente un espacio o también si lo que desea es tapar una pared con la pintura desgastada. Asimismo, es ideal usar papel pintado de pared si alguien en casa es alérgico al olor de la pintura.
Vale destacar que el proceso de aplicación de estos tapices es sencillo, pero también requiere la preparación de las paredes para evitar que aparezcan burbujas o grietas que puedan dañar el diseño.
Combinando pinturas y tapices
Pintar la casa con pintura común requiere de preparación de los espacios antes y después de su aplicación, pero el lado positivo es que, si la pintura es de calidad, puede perdurar en el tiempo, resistir al polvo y la humedad. Lo mismo aplica para los papeles de papel pintado de pared.
No obstante, no hay una regla que diga que el papel tapiz no se puede usar junto con las pinturas. De hecho, en la cocina o baños suelen utilizarse los vinilos decorativos adhesivos para recrear los azulejos. En el cuarto de juegos también se pueden combinar estos dos elementos para fijar los stickers alusivos al ambiente.
Otro lugar que se puede decorar con pintura, vinilos adhesivos y tapices es el cuarto de los niños o la sala de estar. Esto se traduce en una decoración más creativa y personalizada (más a favor del papel), pues todo se va a basar en cómo se ha diseñado el cuarto y cómo desea hacer la renovación.
