El 10 de abril de 2019 el mundo entero por fin pudo conocer la primera fotografía de un agujero negro, imagen que ya es considerada un “hito de la astronomía”.
Múltiples conferencias de prensa se llevaron a cabo en simultánea desde Washington (EE.UU.), Santiago de Chile, Lyngby (Dinamarca), Bruselas (Bélgica), Tokio (Japón), Taipéi (Taiwán, China) y Shanghái (China) para dar a conocer un “impactante resultado” derivado del proyecto Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT, por sus siglas en inglés), cuya misión era la observación directa del entorno de un agujero negro a través de la utilización de una red mundial de telescopios.
Y este gran logro se hizo realidad gracias al ingenio de una joven científica, que durante su etapa de formación en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) estuvo ocupándose de la creación de un algoritmo capaz de “ver lo invisible”.
Así lo señala una publicación en Twitter de la propia cuenta del MIT:
Hace 3 años la estudiante de posgrado Katie Bouman lideró la creación de un nuevo algoritmo para producir la primera imagen de un agujero negro. Hoy dicha imagen fue publicada.
Tres años antes (2016), mientras describía el mencionado proyecto, Katie afirmó que para poder hacer tal trabajo se necesitaba “un telescopio tan grande como la Tierra”. No obstante, los expertos consiguieron captar el fenómeno espacial recopilando la información de los radiotelescopios ubicados alrededor del mundo e integrarla en una sola imagen empleando el algoritmo creado por la científica.
Según información del diario The Guardian, además de haber desarrollado el algoritmo, Katie Bouman también realizó algunos análisis para comprobar que la foto no fuese el producto de un error técnico.
La investigadora publicó en Facebook una foto suya al tiempo que observaba la transmisión en vivo del evento, a la cual añadió:
Observando con incredulidad, mientras que la primera imagen de un agujero negro que he tomado estaba en proceso de ser reconstruida.
Lo que se observa en la fotografía
Sobre esto, el astrónomo Sheperd Doeleman, director de la iniciativa EHT, dijo:
Hemos visto lo que pensábamos que no era visible. Hemos visto y tomado una foto de un agujero negro
De acuerdo a lo informado en Twitter por parte del proyecto EHT, la foto evidencia un brillante anillo en proceso de formación mientras se ondula la luz en la intensa gravedad en torno a un agujero negro que es 6.5 billones de veces más masivo que el Sol. La zona oscura central, al mismo tiempo, es la sombra del agujero negro.
Doeleman considera que tan solo hace una generación, la obtención de este resultado habría sido imposible, y añadió que el progreso tecnológico de los últimos diez años ha dado la posibilidad a los científicos de “ver lo invisible”.