Los préstamos rápidos son transacciones sencillas para obtener dinero con celeridad, sin los requisitos de los créditos tradicionales. Son una gran alternativa sin papeleos engorrosos y aprobados en tiempo récord.
¿Para qué se crearon los préstamos rápidos?
Los imprevistos financieros son situaciones por la que todos pasamos alguna vez. Normalmente son emergencias de mayor o menor nivel de gravedad. Ya sea debido a la ruptura de una tubería, la avería del coche o una enfermedad, entre muchas otras situaciones que pueden presentarse; lo cierto es que generalmente estos imprevistos requieren una respuesta urgente que ofrezca una pronta solución a la situación.
Así entonces, los préstamos rápidos fueron creados pensando en estos escenarios, lo cual hace que tengan aprobaciones flexibles y diligentes. En consecuencia, se han convertido en una solución efectiva y rápida en determinados momentos y son una alternativa a los préstamos tradicionales que tienen otro tipo de exigencias para otorgarlos.
¿Para quiénes están pensados los préstamos rápidos?
Estos préstamos están destinados a personas mayores de edad, residenciados en el país, que requieren de liquidez inmediata por un gasto imprevisto o un proyecto. Cualquiera sea la razón, la tramitación es corta, sencilla y cómoda.
Pedir un préstamo estando en un listado de morosidad
En estos casos, cuando la persona se encuentra en un listado de morosidad, la mayoría de los bancos no conceden prácticamente ningún tipo de préstamo, sin embargo, existen compañías especializadas para préstamos rápidos con ASNEF que tienen condiciones flexibles y consideran otros factores a la hora de otorgarlos. Algunas tienen sistemas pensados y diseñados justamente para personas que se encuentran en este tipo de situaciones. Otros listados de morosidad similares a ASNEF son: EQUIFAX, RAI, CIRBE o CIR, FIJ, BADEXCUG y CIREX.
Estas compañías, siendo conscientes de lo fácil que es aparecer en los registros de ASNEF (incurrir alguna vez en algún impago o atrasarse en el pago de cualquier factura), toman en cuenta otros elementos para aprobar el préstamo, como, por ejemplo, algún tipo de garantía o aval, historial crediticio, solvencia económica, etc.
Los préstamos personales rápidos online a través de estas compañías especializadas tienen un número menor de requisitos y un proceso de solicitud muy diligente.
Características de los créditos rápidos
Estos son los principales pros y contras de los préstamos rápidos:
- El importe no es muy alto. Para un préstamo mayor es necesario otro tipo de solicitud, pero entonces los requisitos y las garantías que piden para otorgarlo también aumentan.
- Los plazos para pagarlos son cortos, generalmente menos de un mes, aunque existen acuerdos de cancelación en cuotas o extendidos por un año, depende de lo pactado.
- Los intereses (tasas TAE) son más elevados que con los préstamos tradicionales, ya que no se piden muchas garantías.
- Se pueden conceder online. En algunas ocasiones existen ofertas y planes especiales.
- Se aprueban en un plazo muy corto, a veces menos de 24 horas.
- Son accesibles desde cualquier parte debido a la conexión vía internet.
En conclusión, los préstamos rápidos son una gran solución, en comparación con los préstamos tradicionales que generalmente se gestionan con el sistema bancario. Son ideales cuando se necesita una cantidad de dinero no muy grande de manera rápida y efectiva. Además, las compañías especializadas en este tipo de préstamos ofrecen diversas alternativas que resultan muy útiles al usuario.