El primer trimestre de embarazo es el comprendido entre la semana 1 y 13 de gestación. Tengamos en cuenta que este cálculo comienza con la fecha de la última menstruación, es decir, unas dos semanas antes de la concepción, lo que significa que en las dos primeras semanas no hay embarazo en realidad.
¿Por qué se hace esto? Por las dificultades de calcular con exactitud la fecha de la ovulación de una mujer y la fecha de la concepción, entonces por conveniencia se estableció la fecha de inicio de la última regla como inicio del embarazo.
Una mujer no se entera que en efecto está embarazada hasta por lo menos la semana 4, que es cuando experimenta la falta de la menstruación, así que es más o menos en ese momento que comienza a tener los cuidados propios de una embarazada.
Inicio del tercer mes
Es posible que la primera ecografía se haga a las 10 semanas de embarazo, en esta se puede apreciar un feto de 2,5 cm, ya los órganos están formados y funcionando. En este momento el médico ordena los primeros exámenes de laboratorio para constatar los niveles de albúmina, glicemia, hemoglobina y muchos otros, además constatará la presencia de gérmenes.
En este período la madre tiene la piel más sonrosada y lustrosa, puede experimentar cambios en la estructura del cabello y las uñas, y es posible que deba cambiar sus productos estéticos. También en esta época tienden a desaparecer las náuseas matutinas, pero empiezan los problemas de estreñimiento y acidez estomacal.
A las 11 semanas de embarazo el feto mide unos 3 cm, es posible que ya se note la barriga, aunque si es el primer embarazo de la madre es posible que no se note mucho. En este momento se puede realizar, si el médico lo recomienda, la biopsia de corion, que es un examen que permite hacer un estudio genético del feto, de esta manera tomar precauciones si se detecta alguna particularidad genética.
En este período se incrementa la sed en la gestante, eso es debido a que el volumen de sangre en el cuerpo aumenta y el requerimiento de agua es mayor. También comienza a experimentar frecuentes ganas de orinar, debido a que la vejiga está muy cerca del útero y este ya tiene una distensión importante.
Comienza a notarse
A las 12 semanas de embarazo el feto es del tamaño de un puño, y ya se hace más notoria la panza de la madre. En este momento, el organismo ha regulado los niveles hormonales y la madre se siente mejor, comienzan a desaparecer la fatiga y el sueño excesivo. La tiroides del bebé comienza a funcionar, así que la madre debe incrementar su consumo de yodo.
Algunas gestantes experimentan hambre excesiva, por ello se deben tomar precauciones para que no haya aumento de peso indeseable, se debe poner atención a las características de los alimentos para dar preferencias a los que aportan más nutrientes y vitaminas y desechar las calorías vacías. Para tener una idea, la madre debe aumentar sólo un kilogramo de peso por mes de embarazo, a menos que el especialista recomiende otra cosa.
A las 13 semanas de embarazo ya la embarazada está en el segundo trimestre y comienza a sentir las pataditas del bebé, esto se debe a que ya se desarrollaron los huesos y el feto comienza a moverse. Si el embarazo es el primero de la mujer, le costará más distinguir esos movimientos, pero desde el momento en que los sienta deberá estar al pendiente de ellos, ya que una disminución en los mismos es síntoma de alarma.
Como hemos visto, el primer trimestre tiene una importancia vital en un embarazo, ya que es en este período que se forman los órganos, incluyendo las células nerviosas del cerebro, además el embarazo es más sensible al uso del alcohol, tabaco y los medicamentos, con lo que no se debe hacer uso de ellos. Como se dijo al principio, las primeras semanas se desconoce el embarazo y es por esto que los expertos recomiendan tomar precauciones desde que se decide buscar un bebé.