Se ha agitado el mundo de la fabricación de autos: SEAT está programado para desaparecer como marca de vehículos. Lo confirmó Thomas Schäfer, el director ejecutivo de Volkswagen, al declarar que la icónica firma española cederá su espacio a Cupra.
«La dirección de SEAT ahora es Cupra», afirmó el alto cargo a Autocar durante el evento del Motor Show de Múnich 2023. Este movimiento ya se murmuraba en círculos periodísticos especializados, aunque no se anticipaba un anuncio oficial tan temprano.
Es importante señalar que el adiós a SEAT no se producirá de inmediato ni significará la desaparición total de la marca. De acuerdo con Schäfer, los coches que están actualmente en la línea de producción de SEAT seguirán fabricándose hasta que completen su ciclo vital. Posteriormente, Cupra tomará el relevo.
La despedida de SEAT
¿Cuál es el destino futuro de SEAT? Según el director ejecutivo de Volkswagen, «se le asignará un nuevo papel». Además, asegura que la decisión no fue improvisada; evaluaron varias opciones antes de decidirse a potenciar a Cupra.
Así lo señaló Schäfer:
Mirando atrás, creo que fue la elección adecuada, aunque es un riesgo. He sido testigo del surgimiento y declive de muchas marcas, pero esta parece ser una decisión acertada. Cupra ya supera a Alfa Romeo y Polestar.
Volkswagen desvincula a SEAT para impulsar a Cupra
Los comentarios del CEO de Volkswagen quizás no caigan bien, pero hacen evidente que SEAT dejó de ser un foco central para el Grupo. De hecho, Schäfer confesó que consideraron revitalizar la marca, pero dado su historial de pérdidas financieras, decidieron poner todo su peso detrás de Cupra.
Adicionalmente, Schäfer aseguró que no prevén conflictos con el Gobierno español por este giro estratégico. Subrayó que Cupra no solo ha mostrado un crecimiento acelerado en España, sino también en el panorama europeo.
En lo que respecta al retiro total de SEAT como productor de autos, se estima que podría concluir antes de 2030. No obstante, Volkswagen estaría planeando una «transición» a Cupra mucho antes. Esto podría resultar en que algunos de los vehículos más reconocidos y lucrativos de SEAT continúen en producción, aunque bajo una nueva insignia. Un ejemplo prominente sería el SEAT León, que en 2024 podría debutar en una versión renovada, pero como un modelo Cupra.
Las razones detrás del ocaso de una emblemática firma automovilística
La desaparición progresiva de SEAT como fabricante de automóviles responde a varias causas, algunas más obvias que otras. Thomas Schäfer justificó el movimiento en términos financieros, afirmando que Volkswagen ya no cuenta con los recursos para respaldar tanto a SEAT como a Cupra como marcas líderes en el sector. Al final del día, la elección se inclinó hacia Cupra debido a su mayor potencial de rentabilidad.
Esto resulta completamente lógico al analizar las cifras de SEAT S.A., la entidad que abarca tanto a SEAT como a Cupra. De manera clara y sencilla: Cupra ha sido el salvavidas económico de la empresa en el último año.
Para ofrecer un panorama más detallado, SEAT S.A. comercializó 385.592 vehículos en 2022, lo que supone una disminución de más del 18% en comparación con las 470.531 unidades vendidas en 2021. De la cantidad total de coches vendidos, 152.896 pertenecían a la marca Cupra, mientras que los restantes 232.696 eran de la marca SEAT.
Lo llamativo es que de los 470.531 vehículos vendidos en 2021 por SEAT S.A., 391.204 eran de la marca SEAT y sólo 79.327 de Cupra. Esto se traduce en que, entre 2021 y 2022, las ventas de la marca «principal» se redujeron en un 40,52%, mientras que las de la marca «secundaria» se dispararon en un 92,74%.
Y lo más intrigante es que, a pesar de esta caída en ventas, SEAT S.A. obtuvo beneficios en 2022, un detalle crucial dado sus dos años anteriores de números desastrosos. En efecto, el año pasado el beneficio operativo alcanzó los 179 millones de euros, en contraste con las pérdidas de 371 millones en 2021. Y todo ello gracias a Cupra.
Factores que van más allá de las cifras
Es importante tener en cuenta también otros aspectos relevantes. Por un lado, está la prohibición que Europa impondrá a la venta de coches de gasolina y diésel a partir de 2035. Esto coloca a SEAT en una situación delicada, ya que no tiene un plan sólido de electrificación. Si bien lanzaron el Mii Electric en 2019, los esfuerzos ahí se detienen.
Los proyectos más ambiciosos de electrificación de Volkswagen y la firma española se han concentrado en Cupra, que rápidamente pasó de ser una sub-marca deportiva de SEAT a una iniciativa independiente con un potencial enorme. Esto se manifiesta claramente en modelos como el Cupra Born, lanzado en 2021, y el más reciente Cupra Raval.
Este enfoque resulta coherente. Al revisar los números de venta mencionados antes, queda claro por qué la dirección futura de la compañía en términos de vehículos eléctricos está con Cupra. Si SEAT ya está perdiendo terreno en un segmento donde sus márgenes son bajos, ¿por qué gastar enormes sumas de dinero para electrificar su gama?
Recordemos que el Grupo Volkswagen ha tenido que buscar alianzas en China para mantener a flote sus marcas más destacadas, como VW y Audi, en el mercado de coches eléctricos. Así, la perspectiva de que los alemanes financien una transición eléctrica para SEAT carece de fundamentos.
El impacto de las regulaciones Euro 7
Además de la transición hacia la movilidad eléctrica, el ocaso de SEAT podría estar intrínsecamente relacionado con la próxima entrada en vigor de las normas Euro 7 . Estas nuevas directrices, que limitan las emisiones contaminantes de los vehículos con motores de combustión interna, se implementarán a partir del 1 de julio de 2025. Varios de los grandes fabricantes automovilísticos europeos han expresado su desacuerdo, considerándola poco práctica.
En este sentido, la firma española no ha sido una excepción. Wayne Griffiths, director ejecutivo de SEAT y Cupra, manifestó su preocupación sobre el cronograma y las consecuencias de esta reglamentación:
Aplicar Euro 7 en su forma actual implicaría dejar de producir estos tipos de vehículos, poniendo en riesgo el cierre de plantas y la pérdida de miles de empleos, lo cual es inaceptable tanto para nosotros como para el resto de la industria.
SEAT argumenta que fabricar vehículos económicos con motor de combustión será inviable bajo las condiciones de Euro 7. Este enfoque contraviene los objetivos de Volkswagen, que apunta a centrarse y fortalecer a Cupra.
Según advirtió Griffiths:
Los precios y los costos de producción aumentarán drásticamente, hasta el punto de que probablemente no podamos fabricar estos vehículos.
SEAT y su incierto horizonte sin automóviles
Aún no está del todo claro qué ocurrirá cuando SEAT cese la producción de vehículos. Según fuentes de Volkswagen, «se asignará un nuevo rol a la marca». Ya circulan rumores de que podría estar vinculada con proyectos relacionados con la movilidad eléctrica, como patinetes eléctricos y motocicletas.
Cabe recordar que SEAT ya tiene alguna experiencia en esta área. La compañía dispone de la línea MÓ, que ha lanzado productos como el eScooter 125 y el eKickScooter 65. No sería sorprendente, por lo tanto, que la histórica marca española se enfoque principalmente en el ámbito de la micromovilidad.
Existe, además, un panorama interesante para las instalaciones de producción de SEAT en el futuro. Volkswagen anunció en marzo que SEAT S.A. liderará la estrategia de vehículos eléctricos pequeños, como el mencionado Cupra Raval y el VW I.D2all. Y que la planta de Martorell fabricará vehículos eléctricos para diversas marcas del grupo a partir de 2025.
La situación genera una mezcla de emociones y un cierto aire de nostalgia. Sin embargo, es importante recordar que Cupra seguirá siendo una marca de origen español. Desde Volkswagen, la intención es clara: convertirla en una de las 100 mejores marcas globales para 2030.
La incertidumbre sobre cómo se desarrollará esta situación permanece. Lo que sí es seguro es que en un futuro cercano ya no veremos nuevos vehículos con el emblema de SEAT saliendo de las líneas de producción del Grupo Volkswagen.
