Cuidar de uno mismo es fundamental porque cada uno es su mejor defensor. Es la ruta más segura hacia el confort, la felicidad interna, la salud integral, amarse y reconocer lo valioso que se es. Al hacerlo no solo se conseguirá vivir más tiempo, sino también con mayor calidad. El autocuidado externo no debe verse como un lujo, ni vincularse con la banalidad, por el contrario, se tiene que internalizar como una prioridad.
Ante la gran influencia que tiene el bienestar físico en lo emocional, surgió la disciplina de la medicina estética, que no busca exaltar la belleza y realizar retoques que permitan acercarse a los estereotipos clásicos. Sus profesionales trabajan con el fin de incrementar la autoestima, la confianza y la comodidad de sus pacientes, bajo el concepto de “belleza y envejecimiento saludable”.
A la hora de empezar tratamientos estéticos, es obligatorio acudir a clínicas que cuenten con un personal médico experimentado, con aparatos de última tecnología y que usen los productos de la mejor calidad.
Un ejemplo es la clínica Dermitek, referente desde 1998 en dermatología en Bilbao, que ofrece a sus usuarios trasplantes capilares, depilación láser, eliminación de varices con láser endovenoso, cirugías estéticas, reducción de arrugas, aclaramiento de manchas, rejuvenecimiento de la piel, lipoláser, ginecología estética y eliminación de tatuajes.
Hallar la mejor versión de cada uno
Si bien la medicina estética fortalece el bienestar emocional, hay que tener presente que no es el único medio para alcanzarlo, porque se puede caer en la patología de obsesionarse con sus procedimientos. El autocuidado se compone a su vez de una buena alimentación, del ejercicio físico y de la meditación para gestionar las emociones, identificar las necesidades y pensar en las estrategias que puedan cubrirlas.
La coach de vida, Hannah Braime, enfatiza que en la infancia las personas dependen de sus padres en cuanto al cuidado y a la satisfacción de sus necesidades, pero en la adultez esa responsabilidad recae sobre el mismo, por eso se hace esencial el autocuidado, que cede la posibilidad de descansar y enriquecerse física, mental y emocionalmente.
95% de los españoles quiere cambiar algo de su físico
Los datos de una encuesta llevada a cabo por Consumer Beauty Insight Study revelaron que un 95% de sus consultados en España admitió estar de acuerdo con cambiar algo de su físico. De estos, un 68% indicó que el cambio sería en alguna área de su rostro. Asimismo, un 83% considera que lucir bien es sentirse bien. No obstante, un 49% afirmó que se sentiría más seguro si se hace un cambio físico, un 47% más atractivo y un 37% más positivo.
Desmontando mitos
En la era digital, se está expuesto a una innumerable cantidad de información, que puede ser de valor, fiable y contrastada, pero también falsa y maliciosa. El personal de salud se ha dedicado por medio de sus redes sociales como Instagram, TikTok y YouTube a orientar, desmontar mitos sobre lo que es la medicina estética e informar acerca de los mejores tratamientos adaptados a cada tipo paciente.
Haciendo entender que la belleza es subjetiva y diferente, que los procedimientos estéticos son una manera de acentuar las cualidades únicas que todo ser humano posee, de modo tal que se refuerce su autopercepción y el nivel de satisfacción personal.
Con el pasar de los años, esta disciplina médica ha ido perfeccionándose y avanzando con tratamientos accesibles y poco invasivos. Igualmente, en la actualidad está 100% normalizada porque es un hecho que cuidarse tiene que ser un hábito y una cultura para implementar de por vida.
