Si quieres mantenerte sintiéndote joven mientras envejeces, es crucial garantizar un buen descanso nocturno. Según una nueva investigación, dormir entre siete y nueve horas cada noche puede proporcionarte una sensación de juventud al despertar.
Existe la posibilidad de que esa percepción no sea solo subjetiva. Investigaciones han evidenciado que sentirse más joven se correlaciona con una mejor salud física y mental, así como con una mayor esperanza de vida .
Como señalan los neurocientíficos clínicos Leonie Balter y John Axelsson del Instituto Karolinska de Suecia:
Si bien estudios previos han indicado que sentirse mayor está relacionado con una peor calidad del sueño, nuestros datos sugieren que el sueño podría ser más influyente en la percepción subjetiva de la edad que viceversa.
Estos descubrimientos respaldan la idea de que el sueño, como un fenómeno biológico crucial, podría ser fundamental para mantener una sensación de juventud.
La falta de sueño se reconoce por restarle alegría a la vida, pudiendo alterar emociones, aumentar la sensibilidad al dolor y modificar la percepción de los demás.
Para indagar cómo afecta esto la percepción de uno mismo, Balter y Axelsson llevaron a cabo dos experimentos.
En el primer estudio, participaron 429 adultos de entre 18 y 70 años, a quienes se les realizaron encuestas sobre diversos aspectos de su vida, incluyendo sus sensaciones de juventud, la cantidad de días en los que habían experimentado privación de sueño en el último mes y su nivel de somnolencia .
Aquellos que reportaron haber dormido plenamente durante los 30 días anteriores, en promedio, se sintieron 5,8 años más jóvenes que su edad real. Cada noche de sueño insuficiente incrementaba en promedio la sensación de envejecimiento en 0,23 años para el participante promedio.
Profundizando aún más, Balter y Axelsson llevaron a cabo un estudio con 186 adultos de hasta 46 años para evaluar cómo afectaba el dormir solo cuatro horas durante dos noches seguidas, seguido de dos noches de nueve horas de sueño.
Comparado con una noche de sueño completa, las noches de sueño restringido hicieron que los participantes se sintieran, en promedio, 4,4 años mayores.
Además, se observó una estrecha relación entre las sensaciones de somnolencia y alerta y las percepciones de edad.
Los niveles más altos de alerta se asociaron con una sensación de juventud promedio de cuatro años menos, mientras que los participantes más somnolientos tendían a sentirse seis años mayores que su edad real.
Según explica Balter :
Esto significa que el pasar de estar alerta a sentirse somnoliento añadía sorprendentemente unos 10 años a la edad percibida.
Otro descubrimiento intrigante fue que los participantes que se identificaron como «personas matutinas» se sintieron relativamente más jóvenes cuando lograron dormir las nueve horas completas por noche. Sin embargo, también fueron más sensibles a las percepciones negativas de su edad cuando experimentaron dificultades para dormir durante la noche.
Los autores instan a realizar estudios adicionales para investigar la relación entre el sueño y la percepción de la edad. Mientras tanto, ambos sostienen que «proteger el sueño probablemente sea un factor crucial para mantener una sensación de juventud».
