Dos ex-integrantes del Servicio Secreto de Estados Unidos han llevado a cabo un nuevo estudio sobre los hechos que rodearon la muerte del Führer y que desmentirÃan la versión de su suicidio junto a su cónyuge, Eva Braun, el 30 de abril de 1945 en BerlÃn, documenta ‘‘The Daily Express’.
El ex-agente de la CIA Bob Baer y Tim Kennedy, un militar estadounidense que intervino en la detención del jefe de Al Qaeda Osama Bin Laden, analizaron alrededor de 12 mil documentos desclasificados sobre el polémico caso.
Los pormenores de su investigación hacen parte del documental ‘Hunting Hitler‘ (Cazando a Hitler) presentado por el canal History Channel.
Según dicho trabajo, datos de la Inteligencia británica afirman que el capitán Peter Baumgart, piloto de la Luftwaffe (la fuerza aérea de Alemania en la época nazi) fue quien se encargó en forma secreta de sacar a Hitler de BerlÃn un dÃa antes de su presunto suicidio.
Igualmente se hallaron evidencias de la existencia de una ruta de escape desde su búnker hacia un campo lo suficientemente amplio como para el despegue improvisado de una aeronave.
Hitler en Argentina
Por otro lado, los investigadores señalan que existen datos que ubican en Argentina un campamento militar donde el caudillo nazi pudo haber llegado luego de su escape de Europa con el fin de crear un Cuarto Reich, versión que sostiene la mayorÃa de miembros del régimen que se refugiaron en el paÃs suramericano cuando terminó la Segunda Guerra Mundial.
La hipótesis formulada por ambos expertos gira en torno al único resto que existe de Adolf Hitler: una supuesta parte de su mandÃbula inferior, aceptada por historiadores como pieza clave y prueba de su fallecimiento en 1945 que, según parece, fue adquirida ese mismo año por los soviéticos. Sobre esto, Baer asegura que ese elemento óseo, supuestamente conservado por el Kremlin y al que no se le han hecho análisis forenses, podrÃa ser la evidencia definitiva.
“No existen testigos fiables que corroboren el avistamiento de Hitler en Argentina. Por otra parte, hay colectivos nazis en ese paÃs que sencillamente se niegan a hablar”, concluye.