A esta altura de la historia, es normal estar familiarizados con el concepto de router o enrutador: es ese pequeño dispositivo rectangular que nos permite conectarnos a internet en la mayoría de los hogares.
En concreto, un router gestiona el envío y la recepción de paquetes de datos entre dos o más dispositivos; un enrutador WiFi, entonces, distribuye y administra la conexión inalámbrica a una red, por lo general de internet, en un espacio determinado. Llegamos así al concepto, más actual, de enrutador WiFi inteligente.
Un enrutador WiFi inteligente cumple las mismas funciones que uno tradicional, a la vez que integra toda una nueva serie de funcionalidades y automatizaciones tendientes a mejorar y facilitar la configuración, administración y optimización de la red.
Selección automática de frecuencia
Una de las funciones más útiles incluidas en la gran mayoría de los routers inteligentes, como los comercializados por Orange o Vodafone, es la posibilidad de automatizar la selección de frecuencia.
Los enrutadores WiFi tradicionales crean una red separada para cada una de las frecuencias o bandas en las que operan (de 2,4 o 5 GHz, por lo general) y son los usuarios los que deben elegir y conectarse a cada red; los routers inteligentes, en cambio, disponen de una única red y alteran la banda o la frecuencia a la que se conecta cada dispositivo automáticamente, optimizando así la calidad de la conexión.
Aplicaciones móviles
Configurar un router smart es mucho más fácil que uno tradicional: por lo general, estos dispositivos incluyen aplicaciones móviles con los que pueden sincronizarse, para que modifiques los parámetros de conexión fácilmente, creando redes secundarias para invitados o cambiando el nombre de red y la contraseña en minutos.
Con estas aplicaciones también puedes monitorear el consumo de banda de los diferentes dispositivos conectados a tu red, de modo que identifiques fácilmente las fuentes de ineficiencias en la calidad y la velocidad de tu conexión. A su vez, puedes utilizar un speed test o un test de velocidad de conexión para comprobar la diferencia cada vez que modificas la configuración de tu router inteligente.
Mejoras de seguridad
Es muy probable que tu ordenador cuente con algún tipo de software de antivirus y antimalware; es igual de probable que tu móvil y tu tableta (y demás dispositivos inteligentes) no lo hagan.
Los enrutadores inteligentes incluyen niveles cada vez más avanzados de protección, con potentes cortafuegos y protocolos de encriptación que se actualizan automáticamente y proporcionan una protección integral de tus dispositivos, incluso si estos no cuentan con sus propios sistemas antimalware.
Mejor rendimiento
La mayoría de los enrutadores inteligentes cuentan con la posibilidad de configurar la funcionalidad avanzada de QoS (Calidad de Servicio), con la cual puedes adjudicar un porcentaje fijo de ancho de banda a dispositivos específicos, de modo que, sin importar cuántos dispositivos estén conectados a la red al mismo tiempo, el que tú has priorizado mantendrá la misma calidad de conexión.
El potencial de los enrutadores WiFi inteligentes, en todo caso, va mucho más allá: son un elemento clave en el diseño de hogares inteligentes, ya que, a través del Internet de las Cosas (IoT), funcionan como centro de control de los dispositivos inteligentes en el hogar.
