Parece algo sencillo, pero hay que cumplir con todos los trámites para que un profesional se dé de alta como autónomo. Es preferible contar siempre con los mejores asesores para hacerlo lo antes posible.
Una nueva aventura: Hacerse autónomo
Quien desee emprender un negocio propio está en la obligación de llevar adelante todos los trámites para independizarse. Solicitar el alta autonomos es el primer paso para que la actividad laboral que una persona pueda trabajar por cuenta propia de forma lícita.
Esta es una decisión muy importante, porque se trata de emprender un negocio de manera independiente, razón por la cual hay que darse de alta como autónomo para poder trabajar sin inconvenientes.
De este modo, se tiene una menor carga administrativa si se elige al gestor adecuado para el asesoramiento. Lo primero es buscar profesionales capacitados, para que den la orientación adecuada en el momento de tomar esta decisión. Estos pasos deben gestionarse ante la Agencia tributaria y también en la seguridad social.
Iniciar la gestoría autónoma
Cuando alguien decide darse de alta autonomo lo más adecuado es seleccionar a personal cualificado para la asesoría en este área. El motivo es que los trámites para ser autónomo pueden resultar tediosos y complejos.
Quizás lo más pertinente sea acudir a profesionales especializados como gestiría eMadrid, ya que además de poder ahorrar un tiempo maravilloso para otros menesteres, el nuevo autónomo puede estar más seguro de que su nuevo estatus laboral cumplirá con las obligaciones pertinentes en la seguridad social y en la agencia tributaria.
Conseguir el alta en Hacienda
Este paso es fundamental para darse de alta como autonomo, con lo cual se podrá empezar a facturar e incluir así todos los importes de gastos que son deducibles de la actividad.
El proceso de darse de alta ante la agencia tributaria se ejecuta con el modelo de alta de Hacienda del Censo de Empresarios Simplificado, trámite que puede gestionarse vía online para mayor comodidad del cliente, con un certificado que reflejará toda la información y situación fiscal.
De dicha agencia tributaria dependerá el modo de tributación del Impuesto Sobre la Renta, así como el IVA al que el negocio quedará sujeto. También debe hacer constar el epígrafe del Impuesto sobre las Actividades Económicas, según la vocación de la compañía o negocio. En la razón social, se debe colocar la actividad económica que se sigue como trabajador.
Para conseguir el alta en Hacienda es imprescindible presentar una declaración censal, con dos modelos que proporcionan los datos personales, el comienzo de la actividad a la cual se está dedicando, la dirección del negocio y los impuestos que deben ser pagados.
Vale la pena resaltar que la normativa que regula el autoempleo contempla todas las reducciones y bonificaciones que deberán reflejarse en la cuota de la Seguridad Social. El alta en la Seguridad Social definirá la admisión de la tarifa plana como un beneficio.
Consignar documentos para constituir la empresa
Una vez cumplidos los trámites anteriores de alta como autonomo, hay que presentar el original y la copia de la constitución de la empresa, mientras que al momento de informar la actividad que se desempeñará, debe indicarse la inscripción del IAE y su similar del Código Nacional de las Actividades Económicas, conocido como CNAE.
Al presentar todos los documentos, se evalúan cómo serán las cuotas como autónomos, y de manera aproximada se selecciona la mínima base de cotización, que dependerá de la razón jurídica.
Estas cotizaciones contemplan la incapacidad temporal, la financiación de las prestaciones por riesgo durante la lactancia y el embarazo. También se registra una tarifa plana para casos que son muy específicos para los nuevos autónomos.
Como se puede apreciar, son muchos detalles, pero estando en manos de los asesores adecuados y con el apoyo de las plataformas tecnológicas, el procedimiento para lograr esta condición autónoma será menos engorroso.
Para concluir, lo más recomendable es ir sobre seguro y contratar el servicio de asesoría que más se ajuste a su presupuesto, mediante los gestores que se encarguen de llevar al día todos los requisitos exigidos en la ley.