Inmediatamente al mirar la foto de arriba, surge la pregunta: ¿cuántas manzanas hay? A simple vista, se distinguen tres, pero este reconocimiento podría ser aún más fácil debido a un mecanismo cerebral único.
Conforme a una investigación reciente , existen dos métodos distintos en el cerebro humano para procesar la cantidad de objetos: uno para cantidades de hasta cuatro y otro para más de cinco.
Durante mucho tiempo, los expertos han notado que reaccionamos de forma diferente al evaluar rápidamente números por encima o por debajo de este límite. Sin embargo, no se sabía con certeza si esto se debía a dos procesos neuronales diferentes, según explican los investigadores.
Cuando nos enfrentamos a menos de cinco objetos, solemos identificar el total de forma inmediata y precisa, sin necesidad de contar.
Este fenómeno, conocido como » subitización » y descrito por psicólogos en el pasado, se diferencia del conteo y la estimación. Es una sensación peculiar de reconocer al instante la cantidad de elementos sin contarlos o adivinar.
Aunque somos capaces de subitizar hasta cuatro objetos, esta habilidad se pierde al observar más de cinco. Por ejemplo, al intentar determinar de inmediato un conjunto de siete manzanas, es probable que dudemos y estimemos, tomando más tiempo para responder y con menos precisión.
Dado que la subitización se desvanece abruptamente para cantidades mayores a cuatro, algunos científicos sospechan que el cerebro utiliza dos procesos diferentes para números grandes y pequeños.
No obstante, esta teoría ha sido objeto de debate, como menciona Florian Mormann, coautor del estudio y neurofisiólogo cognitivo del departamento de epileptología del Hospital Universitario de Bonn.
Podría ser que el cerebro siempre estime, pero con un margen de error tan reducido para números pequeños que resulta imperceptible.
Investigaciones previas , en las que participaron algunos autores del estudio actual, han demostrado que el cerebro humano posee neuronas específicas para cada número, activándose selectivamente ante determinadas cantidades.
Descubrieron que ciertas neuronas se activan principalmente al ver dos objetos, mientras que otras tienen una preferencia similar por su propio número de elementos visuales.
Aun así, muchas de estas neuronas también responden a números ligeramente mayores o menores, con una activación menos intensa para cantidades que se alejan de su número focal, según indican los investigadores.
Según explica Andreas Nieder, neurobiólogo de la Universidad de Tubinga:
Una célula nerviosa que se activa ante ‘siete’ elementos también lo hace para seis y ocho, aunque de manera más tenue. La misma célula permanece activa, pero en menor medida para cinco o nueve elementos.
Este «efecto de distancia numérica» también se observa en monos, algo que Nieder había demostrado en investigaciones previas. Sin embargo, entre los humanos, este fenómeno suele presentarse solo con cinco o más objetos, lo que indica una diferencia aún no identificada en nuestra manera de reconocer números menores.
Nieder señala que debe existir un mecanismo adicional para cifras alrededor de cinco elementos que incrementa la precisión de estas neuronas.
Las neuronas encargadas de números menores pueden inhibir a otras neuronas responsables de cifras adyacentes, según los autores del estudio, minimizando así cualquier señal contradictoria sobre la cantidad observada.
Por ejemplo, cuando se activa una neurona especializada en tríos, también inhibe a las neuronas que normalmente responden a grupos de dos o cuatro objetos. Las neuronas para números de cinco en adelante parecen carecer de este mecanismo.
Para analizar este efecto, los investigadores trabajaron con 17 pacientes del Hospital Universitario de Bonn que se preparaban para una cirugía cerebral por epilepsia. Como parte de su tratamiento, se les implantaron microelectrodos en los lóbulos temporales.
Como señala Esther Kutter, estudiante de doctorado en el equipo de Mormann y primera autora del estudio:
Esto nos permitió medir las reacciones de células nerviosas individuales ante estímulos visuales.
Los participantes observaban una pantalla de computadora que mostraba una cantidad variable de puntos durante medio segundo. Luego, se les preguntaba si habían visto un número par o impar de puntos.
Los sujetos respondían acertadamente y con rapidez hasta cuatro puntos, indican los hallazgos del estudio, cometiendo casi ningún error.
No obstante, al presentar cinco puntos o más, tanto los errores como el tiempo de respuesta aumentaron junto con el número de puntos.
Este estudio proporciona nuevas perspectivas sobre la mecánica cerebral humana, afirman los autores, revelando aspectos clave de cómo procesamos los números y podría ayudar a entender por qué algunas personas enfrentan dificultades en este ámbito.
Futuras investigaciones podrían ampliar nuestro entendimiento sobre trastornos como la discalculia, un problema de desarrollo relacionado con la dificultad en comprender números y conceptos numéricos.