Los porteros automáticos han jubilado la figura del portero de toda la vida, si bien hay aún comunidades de vecinos en España que se niegan a renunciar al trato personal y a la funciones intrínsecas asociadas a esta figura. Su función es la de garantizar el control remoto de quién accede al inmueble. ¿Qué supone la instalación de un portero automático? Hemos consultado a los especialistas y es todo lo que hay que saber sobre la instalación de porteros automáticos.
Los instaladores de porteros automáticos consultados explican que existen dos tipos básicos de porteros automáticos para viviendas y comunidades: los interfonos o telefonillos y los videoporteros. En función de la elección, las necesidades de instalación y el precio varía notablemente.
A estas dos opciones mayoritarias, se suma recientemente una tercera opción: los porteros automáticos inalámbricos, que no requieren de tanta obra de instalación y sobre todo permiten una conectividad plena con el smartphone del propietario, de modo que puede saber quién llama a la puerta incluso sin estar presente en ella.
La mayoría de estos modelos de última generación se instalan en la modalidad de videoporteros, y únicamente requieren de ciertos ajustes en las frecuencias de comunicación y la sincronización con las aplicaciones oficiales para tener controlado el acceso a la vivienda desde cualquier dispositivo.
Ventajas de los porteros automáticos
El principal motivo por el que la mayoría de las Comunidades de Propietarios e inmuebles unifamiliares optan por instalar un portero eléctrico radica en la seguridad que aporta saber quién llama antes de proceder a abrir la puerta de la casa a un desconocido. Especialmente en el caso de personas que viven solas y/o tienen una edad avanzada.
La comodidad de ver y saber en todo momento quién sube o baja en un inmueble también se encuentra entre los argumentos a favor de contar con estos aparatos de control del tránsito.
¿Cuánto cuesta poner un portero automático?
Los porteros automáticos con sistema de solo audio son los más económicos de instalar ya que su sistema cuenta únicamente de un timbre de llamada y una teléfono con pulsador. Los precios medios de estos modelos de porteros automáticos básicos para vivienda y comunidades rondan los 15 o 20 euros por telefonillo.
En cambio, los videoporteros suman la tecnología de la cámara de visualización, y requieren que el aparato individual de cada vivienda también lo instale. Además, aquí también se ha de elegir el tipo de pantalla (tamaño, resolución, funcionalidad) que se desea encargar y que determinará el precio final de la instalación del portero automático. Así, en estos podemos elevar el coste hasta más de 90 euros por cada vivienda según las características del aparato.
Al precio en sí del aparato, se ha de contabilizar la mano de obra. Si bien los sistemas actualides de porteros automáticos son relativamente sencillos de instalar se aconseja recurrir sólo a electricistas profesionales, lo que puede subir la factura de la instalación por encima de los 100 euros.
A mayores se le pueden sumar otros extras como el sistema antivandalismo, la visión nocturna, el registro de imágenes o la apertura de puertas con lector de proximidad, que, consecuentemente, aumentará el precio de cada aparato y de la mano de obra para la instalación en sí.
¿Qué se necesita para instalar un portero eléctrico?
La instalación de porteros automáticos y videoporteros exige cortar el suministro de energía por seguridad del profesional y del propio inmueble. Del mismo modo, cada sistema determina qué tipo de cables son adecuados y cuál es el esquema de montaje idóneo, adí como el tipo de interruptor diferencial que exige.
Tras la instalación del portero eléctrico en la puerta principal, se procede a llevar la comunicación a cada una de las viviendas. Según la situación de los anteriores sistemas de comunicación, es posible que el profesional deba realizar una pequeña obra de adaptación para el aparato y el cableado.
Instalar un video portero en la Comunidad de Vecinos, ¿requiere acuerdo en junta?
Uno de los puntos que más controversia genera para la convivencia en una comunidad de propietarios es saber si la instalación de porteros automáticos (con o sin videoportero) requiere de la aprobación del mismo en junta.
Según la normativa bajo la que se rigen las comunidades de vecino, dado que supone una mejora para el conjunto del edificio, deberá llevarse a la junta de propietarios y aprobarse con mayoría.
Hay que tener en cuenta que en aquellos inmuebles en los que vivan personas con discapacidad o mayores de 70 años, la instalación de cualquier mejora de la accesibilidad a la vivienda es obligatoria. Si el importe total excede las 12 mensualidades de gastos comunitarios, se deberá contar con el voto a favor de la mayoría de los propietarios.
Por otra parte, la comunidad de propietarios debe garantizar, sobre todo en el caso de que se opte por instalar videoporteros, que se cumplen con la normativa vigente en materia de protección de datos.
