El fatídico día en el que Pablo Escobar hizo explotar un avión con 107 personas a bordo

Hace más de 30 años fue perpetrado uno de los atentados terroristas más crueles en la historia de Colombia. El narcotraficante Pablo Escobar dio la orden de detonar una bomba al interior de un vuelo comercial. La aeronave terminó desintegrándose.





Ocurrió la mañana del lunes 27 de noviembre de 1989, cuando un Boeing 727 perteneciente a la aerolínea Avianca recién despegaba de el aeropuerto El Dorado de Bogotá con destino a Cali. Transcurridos algunos minutos, un estallido hizo que el avión saltara por los aires. Uno de los pasajeros había ingresado a él con un artefacto de explosivo plástico.

¿Acto suicida?

De acuerdo a una de las versiones, ni ese mismo pasajero estaba enterado del contenido del paquete que portaba. Por otra parte, se dice que se trató de un terrorista que se vio obligado a inmolarse en el vuelo debido a que su familia estaba amenazada de muerte. Sea como fuere, está claro que el cartel de Medellín, cuyo jefe era Pablo Escobar, planeó y ejecutó el brutal crimen.

El portador de la bomba habría ingresado al Boeing 727 acompañado por un supuesto cómplice que salió del avión minutos antes del despegue. El artefacto explotó en la parte trasera de la aeronave y, según los testigos que vieron el ataque desde tierra, la detonación se presentó por el costado derecho del fuselaje.

Vuelo 203 de Avianca
© AP PHOTO / FELIPE CAICEDO

Debido a que el presunto terrorista se encontraba sentado cerca del tanque principal de gasolina, surgió un segundo estallido de mayor poder que el primero. Esto ocasionó la desintegración en el aire del avión y de sus 107 ocupantes (pasajeros y tripulantes). Los trozos del Boeing terminaron cayendo en Soacha, un municipio ubicado a tan solo 16 kilómetros de la capital colombiana. Otras tres personas en tierra perdieron la vida al caerle encima parte de esos residuos.

El supuesto objetivo

La irracional acción, que cobró la vida de decenas de inocentes, tendría como objetivo asesinar al entonces candidato César Gaviria Trujillo, quien en 1990 llegaría a ser el presidente de Colombia, luego de haber sido el principal colaborador de Luis Carlos Galán, candidato presidencial asesinado en agosto de 1989 por orden del mismo Pablo Escobar.

Gaviria se salvó de milagro. Ese día debía tomar aquel vuelo, pero por motivos de seguridad decidió cambiar de plan.

escombros del avión de Avianca
© AP PHOTO / FELIPE CAICEDO

Otra versión apunta a que en realidad el atentado iba dirigido contra un ex miembro del cartel de Medellín, quien habría estado colaborando con la justicia colombiana.

También se dice que el ataque sencillamente tuvo como objetivo sembrar el terror para medir fuerzas con el Gobierno de Colombia en medio de una guerra declarada por los narcotraficantes contra las autoridades de ese país.

El organizador

Dentro de las víctimas del cruel atentado se encontraban dos estadounidenses, lo que llevó a intensificar la persecución de Escobar y de sus secuaces por parte de la Administración de George Bush padre. Las operaciones policiales de los norteamericanos lograron que en 1991 fuera arrestado el principal organizador del atentado al Boeing 727: Dandeny Muñoz Mosquera.

atentado vuelo 203 Avianca
© AP PHOTO / FELIPE CAICEDO

Este asesino, conocido por el apodo de La Quica, era en ese entonces uno de los principales sicarios del cartel de Medellín. Luego de su arresto, fue juzgado y condenado a diez cadenas perpetuas. Actualmente alias La Quica está cumpliendo la condena en la prisión federal de máxima seguridad ADX Florence de Colorado.

Top 5 ESTA SEMANA

Notas Relacionadas