Primero hay que dejar en claro qué es un sugar daddy y una sugar baby, dos términos anglosajones acuñados por la famosa historia de un rico dueño de una fábrica de azúcar y su mucho más joven novia con la cual llego a casarse, ella le llamaba su “sugar daddy” en referencia cariñosa a su edad y lo que le proporcionaba.
Por su parte y partiendo de esa historia de un matrimonio en el que ella reconocía que uno de los motivos para casarse era que su marido le proporcinaba bienes materiales, un sugar daddy es un hombre que busca una relación con mujeres más jóvenes y gran diferencia de edad a las que proporciona estatus, regalos, manutención e incluso efectivo a cambio de una compañía que implica más que meros encuentros esporádicos.
Por otra parte, los sugar babys son quienes reciben estos regalos y atenciones a cambio de su compañía. En ocasiones y como la historia que ocurrió con el adinerado dueño de la fábrica de azúcar incluso se puede llegar al matrimonio, ¿pero que se esconde detrás de estos acuerdos? ¿Realmente son acuerdos a largo plazo o hay algo más?.
¿A qué tipo de compañía se refiere?
Es común que, al hablar de un intercambio de dinero o regalos por compañía, se piense directamente en servicios sexuales. No obstante, el termino está (o debería estar) alejado de este tipo de acuerdos. En teoría, los sugar daddies buscan tener uno o más sugar babies durante bastante tiempo. Es un tipo de relación en la que ambas partes acuerdan lo que quieren y esperan de la misma al inicio.
La “compañía” que se recibe a cambio suele ser eso, compañía, en una cena, u otros tipos de citas. Puede que un sugar daddy solamente quiera tener a alguien con quien conversar, mientras que otros sí que buscan algo más “íntimo”. Independientemente de esto y aunque pueda llegarse a cierta intimidad efectivamente y en definitiva es algo pertenece al ámbito íntimo del tipo de relación que buscan las dos personas.
De cualquier manera, no se trata de encuentros de una noche, sino de un tipo de relación.
Por lo mismo, los sugar daddies suelen buscar algo más que una cara bonita, y se van más por personas que sean agradables, que compartan ciertos intereses, o demás cosas por el estilo.
¿Qué suelen recibir los sugar babies?
Los sugar babies, a cambio de su tiempo, atención, cuidados, u otro tipo de trato pueden recibir desde una manutención o ayuda en sus estudios hasta una asignación mensual, viajes o regalos. Usualmente esto se habla y acuerda en las primeras citas donde cada uno expone lo que puede ofrecer y lo que necesita para saber si sus intereses van a la par.
Aunque esto es lo que más se suele mencionar cuando se habla de sugar daddies, lo cierto es que a muchas sugar babies no les gusta recibir directamente dinero, por lo que esto da a entender. Pero eso no significa que no tengan otras formas de compensación. Hay quienes reciben regalos caros, desde teléfonos a coches y apartamentos. Otros, se van de viaje por todo el mundo con su sugar daddy, a disfrutar de la vida.
Es distinto para cada persona, hay algunos que reciben un poco de todo, y otros que se conforman con poco. Esto también depende al parecer del feeling que exista ya que, en este tipo de acuerdos, al suponerse a largo plazo también debe existir cierta complicidad, química y buen rollo entre ellos.
¿Por qué causa tanta polémica?
La polémica existe desde muchos frentes desde el más radical abolicionismo que lo tacha de prostitución encubierta hasta asociaciones y ONG que lo ven como una incitación a la prostitución que roza con la peor mafia de proxenetas que haya existido en el mundo. Exageraciones a parte y en definitiva la polémica esta creada como cualquier tipo de relación novedosa y se pone en el punto de mira como ya se puso Instagram o Facebook en su momento, la una por los videos y bailes eróticos y subidos de tono que “cosifican” y la otra por la peligrosa y novedosa forma de conocer gente en internet.
Existen muchas personas que señalan esto como una manera de “venderse” a otros, diciendo que es lo mismo que la prostitución. Esto es algo que depende por completo del punto de vista de cada uno, y de las cosas que decida o no aceptar. Más de uno está dispuesto a pagar solo para tener a alguien de confianza con quien hablar. Mientras que otros lo comparan a simplemente recibir regalos de un novio o novia. Y, claro, también hay quienes no dudan en declarar que sí, es un tipo de trabajo sexual, sin ninguna vergüenza al respecto.
Sea como sea, es un tema que seguirá dando de qué hablar, pese a no ser algo “nuevo”. Después de todo, este tipo de relaciones existen desde hace mucho, simplemente que ahora se le ha dado un hombre llamativo en inglés.