Cada día son más las innovaciones tecnológicas que aparecen con el fin de mejorar aspectos básicos de nuestro día a día. Estos avances abarcan los principales sectores de la economía, incluido el de la belleza, una industria que se estima que alcanzará los 700.000 millones de euros de facturación en 2023.
Por esta razón, no es de extrañar que las empresas especializadas en tecnología quieran hacerse un hueco en este mercado, en el que las necesidades son cada vez más.
El cepillo capilar Kérastase Hair Coach
Se trata de un cepillo inteligente diseñado por Kérastase en colaboración con la empresa Withings. Su diseño incluye seis sensores destinados a recoger información sobre el estado del cabello. El aspecto más llamativo es un micrófono que escucha el sonido del pelo al pasar por las púas para detectar si está roto o dañado, y en qué grado.
Estos datos son enviados a una app a través de la conexión Bluetooth o WiFi, ofreciendo un diagnóstico preciso de la salud de nuestro cabello. Además de un porcentaje global, ofrece una valoración del nivel de daño, enredos, sequedad y rotura. También es capaz de decir si nos cepillamos de manera correcta y nos da consejos sobre cómo hacerlo mejor.
Productos cosméticos en cajas mensuales
Comprar productos en internet es una tendencia muy en boga en los últimos años. Entre los novedosos servicios de las empresas de productos cosméticos se encuentra el envío, a los clientes que lo deseen, de una caja mensual de maquillaje, que contiene cada vez una selección de productos que permiten a los suscriptores descubrir de primera mano los últimos lanzamientos del sector. Esta selección va variando según la época del año, por lo que cada mes es una sorpresa. Se trata de una manera rápida y cómoda de recibir productos para el cuidado de la piel y del cabello seleccionados exclusivamente para ti y satisfacer tus necesidades.
El sistema Tient Particulier para maquillajes personalizados
Ya sabrás que la marca Lancôme ha desarrollado Tient Particulier, un novedoso sistema capaz de crear bases de maquillaje personalizadas según las características específicas de cada persona, gracias a un colorímetro que detecta el tono de la piel de manera precisa. Esta idea surgió de una necesidad real, ya que un 50 % de los consumidores es incapaz de encontrar un maquillaje adecuado. Además, realiza mediciones en barbilla, mejilla y frente, sometiéndolas a un algoritmo de machine learning para calcular el tono adecuado. Una máquina equipada con cuatro colores (amarillo, blanco, rojo y negro) realizará la mezcla en base a estos resultados. Ofrece más de 72.000 posibilidades que, sin duda, cubren los más diversos tipos de piel.
Los parches de piel de La Roche-Posay
My UV Patch es una iniciativa destinada a fomentar la educación y concienciación sobre el efecto de las radiaciones solares sobre la epidermis. Consiste en un parche adhesivo con tintes fotosensibles que se coloca en la piel y se escanea como un código QR. De esta forma, podemos realizar mediciones precisas de nuestra exposición al sol.
Otro innovador sensor es el My Skin Track pH que, como su propio nombre indica, mide los niveles de pH de la piel para determinar el tratamiento más adecuado en cada momento. Se trata de un adhesivo microfluídico que ofrece datos en tiempo real a través de una app, que informa sobre nivel de grasa y sequedad, así como otros problemas de epidermis.
Como hemos visto, estos avances tecnológicos tienen el objetivo de cubrir las necesidades cada vez más complejas de los consumidores preocupados por el cuidado de la belleza. En los próximos años las innovaciones tecnológicas no dejarán de evolucionar, y será imprescindible conocerlas y utilizarlas para estar a la última y no quedarse atrás.