Existen ciertos ejercicios que poco se tienen en cuenta cuando se piensa en mantenerse en forma y prevenir algunas enfermedades. Sin embargo, son importantes a la hora de tener un envejecimiento más saludable.
Este esquema de ejercicios se basa en mejorar el equilibro, a partir de fortalecer la musculatura y la estructura esquelética. Se trata de “la guía olvidada” de la salud, como fue catalogada esta rutina en un informe realizado por la agencia de salud de Inglaterra y por el Centro para un Mejor Envejecimiento.
La recomendación es que este ciclo de ejercicios se debe incluir en, como mínimo, dos sesiones de actividades físicas semanales. Además, en el informe se indicó que no solo las personas mayores deben hacerlos para mejorar su salud.
La directora del departamento de dieta, obesidad y actividad física del Public Health England, la doctora Alison Tedstone, aconseja a todos los adultos que los ejercicios de fortalecimiento y equilibrio se combinen semanalmente con actividades aeróbicas más habituales, como correr o caminar.
Según la doctora, además de beneficiar la salud durante la juventud, la combinación de las rutinas físicas prepara al cuerpo para el envejecimiento, haciendo que la persona sea independiente durante más tiempo.
Músculos, huesos y equilibrio
El fortalecimiento del cuerpo, sobre todo de los huesos y los músculos, no suele ser tan relevante para las personas en el cuidado de su salud general, según las estimaciones de las autoridades inglesas.
Los expertos consideran que el cuerpo alcanza su máximo nivel de capacidad muscular y ósea alrededor de los 30 años. El declive del organismo se va desarrollando de manera natural a partir de ese momento.
La premisa física indica que las actividades para el fortalecimiento de los músculos y los huesos se realicen entre los 18 y 30 años. Gracias a ello, el declive entre los 30 y 60 años será más lento. Una mejor condición de independencia física se evidenciará después de los 65 años.
Además de llegar a la jubilación en mejor forma, algunos procesos físicos naturales pueden ser beneficiados por las actividades de equilibrio y de fortaleza esquelética-muscular, como el embarazo o la menopausia. En el informe también se menciona una mejoría en los casos de diagnóstico de enfermedades, o en procesos de recuperación postoperatoria.
Otros beneficios destacables tienen que ver con los hábitos diarios, como mejorar los patrones del sueño, aportar un aumento de la energía y disminuir el riesgo de sufrir una muerte prematura.
¿En qué consisten estos ejercicios?
Esta guía de la salud incluye:
- El levantamiento de peso, o utilizar el mismo cuerpo para mejorar la resistencia.
- Practicar deportes en los que se usen raquetas, como el tenis y el ping pong.
- Hacer marcha o caminata nórdica (con la ayuda de bastones).
- Practicar deportes y juegos con pelota.
- Sesiones de danza.
Cada persona deberá cumplir rutinas de ejercicios y con la intensidad que le permita su condición física, según su edad y estado de salud. Según los especialistas, existen otras disciplinas favorables para el fortalecimiento general del cuerpo, como el yoga y el taichí.
Este informe inglés también establece que fortalecer los huesos y músculos ayuda a prevenir las caídas, que son causantes del 95% de los casos de fracturas de cadera en las personas mayores.
Por otra parte, una débil estructura muscular incrementa en un 76% el riesgo de caídas, lo que a su vez triplica las probabilidades de sufrir algún nuevo accidente.