Frecuentemente comparada con Nostradamus en tiempos contemporáneos, Baba Vanga fue una clarividente de Bulgaria que saltó a la fama pública gracias a sus presuntas dotes de adivinación durante la Segunda Guerra Mundial.
Privada de la vista desde su juventud, pero aparentemente dotada con la habilidad de avizorar lo que vendrá, rápidamente se erigió en una personalidad altamente respetada. Se dice que figuras de la talla del zar Boris III de Bulgaria y el líder soviético Leonid Brezhnev la buscaron para consultas personales.
Desde aquel entonces, se le atribuyen una serie de pronósticos acertados, que van desde el fatídico naufragio del submarino Kursk en 2001 hasta los devastadores atentados del 11 de septiembre . Lo que hace más asombroso su legado es la escasa existencia de documentos escritos que confirmen sus exactas palabras.
Pese a que Baba Vanga dejó este mundo en 1996, muchas personas continúan otorgándole importancia a sus visiones proféticas. Asombrosamente, una de sus advertencias para 2023, sobre un aumento en la actividad solar con potenciales efectos devastadores para nuestro planeta, parece haber encontrado correlatos en eventos recientes.
En el mes de agosto de 2023, se anunció que la NASA había identificado una inmensa mancha solar con el potencial de liberar llamaradas solares y «eyecciones de masa coronal» de plasma. Tales fenómenos podrían desencadenar serios trastornos en las redes eléctricas y otras estructuras vitales, resultando en impactos perjudiciales para la civilización.
Pero si conseguimos salir indemnes de este año, ¿qué otras visiones de Baba Vanga podrían materializarse en 2024? Veamos algunas de sus más discutidas profecías.
¿Una modificación orbital?
Las erupciones solares no son el único fenómeno astronómico en el radar profético de Baba Vanga. Se cree también que pronosticó un evento todavía más asombroso: un cambio en la propia órbita de la Tierra.
Si bien las trayectorias de los cuerpos celestes en nuestro sistema solar están gobernadas por las fuerzas gravitacionales y son susceptibles de variaciones, tales cambios suelen ser lentos y prolongados. Por lo tanto, cualquier modificación más abrupta tendría efectos catastróficos para todos nosotros. Piensa en cambios climáticos radicales, incrementos en los niveles de radiación y un caos general, ante los cuales estaríamos esencialmente indefensos.
¿Despliegue de armamento biológico?
Una de las predicciones más inquietantes que se atribuyen a Baba Vanga implica que una «nación poderosa» podría llevar a cabo experimentos o ataques con armas de origen biológico .
¿Un salto gigantesco en el ámbito de la computación cuántica?
En este momento, vivimos en la era dorada del aprendizaje automático, lo que explica por qué tecnologías generativas de IA como ChatGPT acaparan los titulares. Sin embargo, lo que no se comenta tanto en los medios convencionales es la acelerada evolución en el mundo de la computación cuántica.
Estos sistemas cuánticos tienen la capacidad de abordar desafíos computacionales de manera mucho más eficaz que las computadoras clásicas, gracias a la implementación de conceptos de la mecánica cuántica y al uso de ‘qubits’ (bits cuánticos) en vez de los ‘bits’ convencionales.
Podría parecer un tema sacado de una novela de ciencia ficción, pero está ocurriendo realmente. Y resulta asombroso pensar que Baba Vanga, una clarividente residiendo en las montañas de Bulgaria, podría haber anticipado un significativo avance en este campo. Si esto llega a concretarse en 2024, indudablemente acelerará la ya de por sí veloz revolución de la inteligencia artificial, afectando la vida de prácticamente todas las personas en el planeta.
¿El advenimiento de humanos diseñados?
Otra profecía de Baba Vanga altamente controvertida habla de seres humanos desarrollados y nacidos en entornos de laboratorio . ¿Estaba sugiriendo que los humanos podrían ser «editados» genéticamente y, por lo tanto, creados según los deseos de sus progenitores? Independientemente de la interpretación exacta de sus visiones, es innegable que estamos ante un escenario distópico difícil de concebir para el próximo año.
Sin embargo, no es descabellado pensar que podríamos ser testigos de notables avances en áreas como la genética, la fecundación in vitro y la gestación, cambios que podrían transformar cómo abordamos el nacimiento. Tal vez no estemos a punto de entrar en una realidad a la Aldous Huxley en «Un mundo feliz», pero podríamos estar al borde de cambios realmente significativos.
¿Impresionantes progresos médicos?
Finalizaremos con un toque más esperanzador: concretamente, la anticipación de Baba Vanga de que la humanidad conseguirá «encadenar el cáncer con cadenas de hierro», o sea, hallar una cura definitiva para esta enfermedad. ¿Será 2024 el año en que esto ocurra?
Cabe señalar que Baba Vanga murió de cáncer y, según cuentan, en una entrevista realizada en 1990 señaló la fecha exacta de su fallecimiento: el 11 de agosto de 1996. Si fue tan certera en sus intuiciones acerca de los avances médicos, podríamos estar a punto de experimentar un futuro notablemente más positivo en lo que respecta a la salud humana. Esto, claro está, si conseguimos evitar el apocalipsis provocado por un cambio en la órbita terrestre.