¿Alguna vez has pensado en visitar Asia? Este es un viaje increíble que debes hacer al menos una vez en la vida, pero asegúrate de no perderte Vietnam. Cuando llegues a la República Socialista de Vietnam, no solo quedarás asombrado por la belleza de este país costero del continente asiático con forma de S, sino que notarás una amabilidad muy distintiva de las valientes personas que han habitado esta zona durante generaciones. Fueron ellos, quienes de alguna manera lograron deshacerse de tres potencias mundiales diferentes como China, Francia y EE. UU., a pesar de ser tecnológicamente inferiores, lo cual es algo verdaderamente admirable.
Este destino ha ganado más popularidad a lo largo de los años, gracias a sus antiguas ruinas, su gente encantadora y su exquisita cocina. Sin embargo, no es un secreto para nadie que todo viaje necesita planificación para que esté libre de preocupaciones. Viajar se ha vuelto más fácil cada día, desde la forma en que viajamos, al igual que la forma en que planificamos y preparamos nuestra documentación. Así que es importante que sigas leyendo para conocer estos consejos antes de viajar a Vietnam.
Consejo #1
Hoy en día, contamos con la ayuda de herramientas digitales para comprar cualquier cosa en línea y eso incluye nuestros boletos de avión, y nuestra visa para visitar la mayoría de los lugares. Es por eso que te alentamos a que des un vistazo a esta plataforma, para poder hacer todo esto desde la comodidad donde te encuentres, **iVisa**. Revisa los comentarios que han dejado cientos de usuarios, y deja que su equipo de expertos te guíe durante todo el proceso.
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Consejo #2
Asegúrate de elegir las fechas correctas en las que deseas viajar. El clima no cambia drásticamente en Vietnam entre estaciones, por lo que puedes viajar durante todo el año. Si deseas visitar desde finales de enero hasta principios de febrero, podrás experimentar el año nuevo lunar vietnamita, y sorprenderte con su cultura, las hermosas celebraciones y las coloridas linternas que le adornan.
Durante décadas, la religión estuvo prohibida en Vietnam, pero en la actualidad las reglas han ido cambiando paulatinamente, y la población está cada vez más presente en las diferentes prácticas religiosas y sus correspondientes actividades. Entonces, durante el tiempo que estés en el país, podrás experimentar diferentes costumbres vietnamitas, pero lo más probable es que encuentres poca actividad comercial, porque la gente está celebrando en familia, y esa es la desventaja de ir durante esa época del año.
Por otro lado, puedes visitar durante la primavera, de febrero a abril, cuando el clima es un poco frío y las hermosas flores brotan en los árboles de las montañas, un momento ideal para visitar Vietnam. De junio a agosto, puedes visitar el sur de Vietnam y disfrutar de maravillosas puestas de sol en la playa. De septiembre a octubre, durante el otoño, es el momento perfecto para estar en Hanói, porque su comida callejera es absolutamente exquisita y cuenta con un clima perfecto. Si en los meses de invierno, que son de noviembre a enero, sientes que hace mucho frío, puedes dirigirte a la Ciudad de Ho Chi Minh o Da Nang.
Consejo #3
Ten cuidado con tus comidas. Aunque la oferta gastronómica vietnamita es exquisita y diversa, no hay muchas normas estrictas de seguridad alimentaria, por lo que es mejor evitar las carnes crudas o aquellas con las que no estés familiarizado, así como morcillas o frutas sin limpiarlas correctamente primero. Otra cosa que debes consumir con cuidado es el pez globo, pues es muy venenoso y debe ser cortado y cocinado adecuadamente por un profesional en la materia.
Otro detalle esencial es no tomar del agua del grifo, especialmente cuando viajas porque no se procesa o filtra, así que apégate a las botellas de agua que vengan selladas. Igualmente, evita a toda costa otro manjar casero muy peligroso, el vino de serpiente casero, porque puede ser muy venenoso y a veces letal. Encontrarás muchos vendedores ambulantes alrededor que expenden alimentos a precios muy bajos, pero la única forma de asegurarte es observando sus prácticas culinarias por un tiempo, así como la cantidad de clientes que ves haciendo fila.
