Los peores premios Nobel jamás otorgados en ciencia (y uno en literatura)

Un premio fue por un procedimiento médico que incapacitó a miles de personas.

Los premios Nobel se encuentran entre los premios más prestigiosos del mundo. Quienes los ganan suelen ser leyendas en sus respectivos campos. Sin embargo, los premios son otorgados por seres humanos, y el juicio humano es imperfecto. Algunas de las elecciones que los diversos comités del Nobel han hecho a lo largo de los años fueron muy controvertidas o incluso universalmente consideradas como errores. Estos son algunos de los peores premios Nobel de todos los tiempos, sin ningún orden en particular.





Johannes Fibiger: Fisiología o Medicina, 1926

Los premios Nobel solían otorgarse bastante rápido después del descubrimiento, logro o evento que los impulsó. Las instrucciones dejadas por Alfred Nobel parecían justificar esta velocidad. Sin embargo, esto ocasionalmente ha dado lugar a premios por descubrimientos que luego resultaron ser una tontería. Tal vez ningún caso de esto sea más claro que el premio de medicina de 1926, que se otorgó a Figiber “ por el descubrimiento del carcinoma Spiroptera ”.

En resumen, la investigación del doctor Fibiger pareció mostrar que cierto parásito ascáride podría causar cáncer en ratas. Sin embargo, experimentos posteriores demostraron que los «cánceres» que afirmó haber observado eran lesiones causadas por insuficiencia de vitamina A. Los gusanos redondos que examinó no causaban cáncer, aunque se sabe que ciertos parásitos sí lo hacen.

El premio es aún más extraño dada la falta de un premio en 1925. Fibiger hizo la lista corta junto con el doctor Yamagiwa Katsusaburō , ambos por su trabajo en la determinación de las causas del cáncer. Sin embargo, se decidió que ninguna de sus publicaciones era suficiente para merecer un premio en ese momento. Katsusaburō no compartió el premio de 1926, pero terminó siendo aquel cuyo trabajo demostró ser preciso. El alquitrán de hulla es cancerígeno.

La Fundación Nobel no rescinde premios. Fibiger todavía figura como ganador a pesar de la refutación de su trabajo.

Bob Dylan: Literatura, 2016

Bob Dylan recibió el premio “por haber creado nuevas expresiones poéticas dentro de la gran tradición de la canción estadounidense”. Muchos poetas han ganado el premio antes, pero las letras de las canciones de Dylan generalmente se consideran de una clase diferente a la poesía de Rabindranath Tagore , Pablo Neruda o T.S. Eliot . The New York Times calificó la selección de “radical”, ya que ningún músico había ganado el premio antes.

Si bien el premio de literatura no se puede otorgar a todos los que lo merecen, los comentaristas señalaron que Dylan pertenece a la misma generación que escritores como Phillip Roth, John Updike y Joyce Carol Oates, ninguno de los cuales ganó el premio por su trabajo. El novelista escocés Irvine Welsh comentó negativamente sobre el premio y dijo:

Soy fanático de Dylan, pero este es un premio de nostalgia mal concebido, arrancado de las próstatas rancias de hippies seniles y farfullantes.

Sin embargo, tanto Oates como Roth estaban en el comité que lo otorgó. El discurso de aceptación de Dylan (que fue pronunciado por el embajador de Estados Unidos en Suecia , ya que Dylan decidió no asistir) se sumergió en obras literarias que le habían causado una gran impresión. Muchos escritores, incluido Salman Rushdie , defendieron la selección de Dylan.

James Watson, Francis Crick y Maurice Wilkins: Fisiología o Medicina, 1962

A veces, lo más controvertido de un premio es quién no lo recibió. Ese es el caso del premio de 1962 por el descubrimiento de la “ estructura molecular de los ácidos nucleicos y su importancia para la transferencia de información en la materia viva ”, es decir, la estructura del ADN .

Solo tres personas pueden compartir un mismo premio Nobel, una regla descrita como arcaica dada la naturaleza contemporánea de la investigación científica. No se permiten nominaciones póstumas (aunque esta regla no fue oficial hasta 1974). Entonces, cuando se otorgó el premio por el descubrimiento del ADN y su estructura, fue para Watson , Crick y Wilkins con exclusión de todos los demás involucrados.

Infamemente, esto incluyó a la doctora Rosalind Franklin , cuyo trabajo en difracción de rayos X produjo imágenes de ADN que fueron vitales para el descubrimiento de su estructura de doble hélice . Los ganadores no citaron el trabajo de Franklin en sus publicaciones iniciales, y Watson la retrató negativamente en su libro  The Double Helix. Nunca fue nominada a un premio, murió en 1958 y se cree que fue víctima de sexismo. Un miembro de su equipo de investigación, el doctor Aaron Klug , ganó el Premio Nobel de química en 1982, continuando el trabajo que él comenzó con ella, lo que sugiere que su trabajo fue realmente digno de un premio.

Enrico Fermi: Física, 1938

A veces, el problema con un hallazgo científico no es que esté equivocado; es que la evidencia no apoya el hallazgo. Este fue el caso del premio de física de 1938 otorgado a Enrico Fermi “por sus demostraciones de la existencia de nuevos elementos radiactivos producidos por la irradiación de neutrones, y por su descubrimiento relacionado de reacciones nucleares provocadas por neutrones lentos”.

Fermi ganó el premio por un experimento que realizó en 1934, que parecía demostrar cómo se podían crear elementos previamente desconocidos al bombardear átomos de uranio con neutrones. A estos nuevos elementos, denominados «ausonium» y «hesperium», se les asignaron los números atómicos 93 y 94, respectivamente.

Sin embargo, no descubrió ningún elemento nuevo. En cambio, se las arregló para hacer la fisión nuclear, en la que los átomos pesados ​​de uranio se dividen para convertirse en elementos más ligeros. Él no estaba al tanto de esto. Los «elementos» que encontró eran solo una mezcla de bario y otros elementos conocidos. Los elementos reales 93 y 94, neptunio y plutonio, se descubrirían más tarde. Ya en 1934 se propusieron explicaciones alternativas de lo que vio Fermi, pero no fue hasta después de que Fermi recibió su premio que se descubrió correctamente la fisión nuclear.

Fermi pasó a supervisar el primer reactor nuclear artificial y la primera reacción en cadena nuclear autosuficiente en la Universidad de Chicago como parte del Proyecto Manhattan. También se le ocurrió una famosa paradoja sobre la vida extraterrestre . El premio de física de 1944 fue para Otto Hahn por su trabajo en el descubrimiento de la fisión, pero es posible que Fermi también mereciera un premio por ese experimento.

António Egas Moniz: Fisiología o Medicina, 1949

El doctor Moniz fue un renacentista portugués que se dedicó a la medicina a tiempo completo después de retirarse de la política. Ganó el Premio Nobel “por su descubrimiento del valor terapéutico de la leucotomía en ciertas psicosis”, es decir, por inventar un método quirúrgico para tratar enfermedades mentales cortando las conexiones entre diferentes partes del cerebro. Inicialmente conocida como «leucotomía prefrontal», los médicos estadounidenses refinaron la técnica y la rebautizaron como «lobotomía».

La cirugía alguna vez fue terriblemente popular. Aproximadamente 40.000 estadounidenses se sometieron a la operación, al igual que 17.000 personas en Inglaterra. Muchas de estas operaciones se realizaron en niños o en personas que no podían tomar sus propias decisiones médicas, como Rosemary Kennedy y Howard Dully.

Si bien la cirugía redujo los síntomas de ansiedad, depresión y psicosis, el corte en el lóbulo frontal dejó a muchos pacientes sin personalidad. Quienes se sometieron a la operación a menudo se describieron como «torpes, apáticos, sin impulso ni iniciativa, letárgicos, plácidos y despreocupados, infantiles, dóciles, necesitados de empuje, pasivos, carentes de espontaneidad, sin objetivo ni propósito, preocupados y dependientes». La operación incapacitó a la Sra. Kennedy de por vida.

Las alternativas, a menudo en forma de productos farmacéuticos, estuvieron disponibles a principios de la década de 1950. La URSS prohibió la práctica en la misma década por preocupaciones morales. Para la década de 1970, la mayoría de las naciones prohibieron el procedimiento, aunque continuó hasta la década de 1980 en Francia. Si bien existieron preocupaciones sobre la práctica desde su introducción, ahora se considera universalmente una reliquia bárbara del pasado. El premio Nobel, el doctor Torsten Wiesel , consideró que el premio del doctor Moniz fue un «asombroso error de juicio».

Como se indicó anteriormente, la Fundación Nobel no rescinde los premios. Su sitio web incluye una sección que defiende la cirugía como el mejor tratamiento disponible en ese momento.

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